Toño encabezando el equipo y acabando muy fuerte.
Juanchi enorme, volviendo a bajar de la hora y media.
Carrera pasada por agua en Oviedo. Nos acompañó la lluvia todo el recorrido y las temperaturas eran más propias de invierno que de las fechas en las que estamos.
Pese a la adversidad metereológica los Galgas no fallamos y acudimos a la cita tratando de medir las fuerzas cara al Maranalón, que ya está a la vuelta de la esquina.
La prueba pese a parecer llana tenía algunos toboganes que se acusaban sobre todo en los últimos kilómetros donde las fuerzas van ya muy justas.
Al final todo cumplimos más o menos los objetivos y acabamos con buenas sensaciones que es lo importante.
Ahora a recuperar fuerzas para el sábado que toca la Media Maratón de Cangas de Onís, donde por supuesto no faltaremos.
Nos vemos en Cangas de Onís.