miércoles, 14 de marzo de 2007

A que sabe un Maratón

Encontré este texto hace ya tiempo en el foro de "Carreraspopulares". Siendo el nuestro un club de "Maratón" que mejor lugar que el blog para reproducirlo.


"¿A qué sabe un maratón?

Sabe a noche sin dormir, a vueltas y más vueltas en la cama, a desayuno que no entra, a visitas repetidas al cuarto de baño, sabe a vaselina, a ponerse los calcetines con mimo, a atarte las zapatillas a cámara lenta.

El maratón sabe a estómago con un nudo muy grande, a dolores repentinos, a apreturas en la salida, a frío en la cara, a deseos de suerte, a foto de grupo, a concentración absoluta, a conjuros mágicos.

El maratón sabe a encontrar tu ritmo cómodo, a agua con limón, a seguir la línea azul, a conocer gente mientras corres, a saludar a los que hace tiempo que no ves, a correr con los que compartes un sueño.

El maratón sabe a estómago vacío, a sudor cayendo por la frente, a esponja mojada que alivia las penas, a miradas escépticas, a público entregado, a darle las gracias a un desconocido que te anima.

El maratón sabe a bebida isotónica pegajosa, a agua fresca y a asfalto duro, sabe a viento en contra, a glucosa por los suelos, a cáscaras de plátano y a botella de agua vacía, a vallas amarillas, al chico de la organización que te avisa de que hay un bordillo, sabe a fruta fresca, a
pañuelos en la cabeza, a gafas de espejo, sabe a gente con resaca que te mira con incredulidad.

El maratón sabe a la mano extendida de un niño para que le correspondas, sabe a un señor mayor que te mira con añoranza, sabe a la mirada del que no se atreve, sabe a la mirada del que promete que el año que viene estará allí, sabe al policía municipal deteniendo el tráfico para que tu pases, sabe al conductor de autobús urbano apoyado pacientemente en el volante; el maratón sabe a la barra de pan y al periódico recién comprado debajo del brazo, a paseo con el perro, a la vuelta a casa después de una noche loca, a coches que pitan con intolerancia y a motos que te adelantan a toda velocidad.

El maratón sabe a tu pareja esperando impaciente para verte pasar en un segundo, un segundo en el que parece que el tiempo se detiene y te da tiempo a decirte tantas cosas sin mediar palabra, sabe a la foto que te hace ya de espaldas, sabe a gritos de ánimo que se mezclan con el bullicio de la ciudad, el maratón sabe a grupo de música que toca sin cesar hasta que pasa el último, sabe a no te pares no te pares.

El maratón sabe a no vuelvo a correr en mi vida, sabe a dolor, a sudor y a lágrimas, sabe a desorientarte, sabe a no saber en qué kilómetro te encuentras, sabe a que tu zancada se acorta, sabe a que tu pulso se dispara, sabe a pinchazos en las rodillas, sabe a los amigos llevándote en
volandas, a gente caminando, a gente que se para, estira y continúa, sabe a gente que abandona cabizbaja......

El maratón sabe a metros que parecen kilómetros, a esfuerzo final, a línea de meta, a sentirte único levantando los brazos, a parar el cronómetro hasta la próxima; el maratón sabe a abrazos sudorosos, a enhorabuenas de desconocidos, a compartir lágrimas con tus amigos, a sentirte y sentarte extenuado, a querer estirar y no poder, a ganas de contárselo a todo el mundo, a buscar con la mirada a tus seres queridos entre el público................"

Michi

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