El pasado sábado tuvo lugar la quinta edición de esta media maratón que une Arriondas con Ribadesella. Cumpliendo el dicho de “en abril aguas mil” el panorama no era muy alentador horas antes de darse la salida, la lluvia arreciaba sin descanso. Tres fueron los galgas (Valentín, Nacho y Michi) que acudieron a la cita y que hasta última hora dudaban si correr o no viendo las malas condiciones metereológicas desde el coche en Ribadesella, momentos antes de coger el bus que nos llevaba a la salida en Arriondas.
Tras la recogida de dorsales, cafés de rigor, charlas con los amigos y demás, se da el pistoletazo de salida con la suerte de haber amainado bastante la lluvia. Estaba perfecto para correr.
Dan la salida y cada uno a lo suyo, Michi buscando únicamente buenas sensaciones y disfrutar, en consonancia con los entrenamientos de las últimas semanas, que fueron bastante tranquilos. Valentín buscando correr por pulsaciones sin pensar y en tiempos y al ritmo que saliese, intentando, según el pulsómetro ir por debajo del umbral anaeróbico hasta el km 17 y a partir de ahí forzar un poco. Y Nacho ver únicamente en que estado se encontraba después del Maratón de Barcelona y como test previo a la media de Gijón dentro de dos semanas.
Puede decirse que todo salió mejor de lo esperado en los tres casos, ni los chaparrones ni el viento sobre todo los tres últimos km, que hicieron presencia, pudieron impedir el buen sabor de boca final de los galgas. Michi corrió muy suelto y recuperando buenas sensaciones después del mal día de la media de Siero, Valentín cumplió a la perfección los objetivos marcados y Nacho, no sólo comprobó que está totalmente recuperado de Barcelona sino que bajó su marca en la distancia en un minuto.
La organización perfecta como cada año. La pena que no acompañó el día.
Los tiempos y puestos finales fueron:
Michi 1:33:18, puesto 76
Valentín 1:42:04 puesto 115
Y Nacho 1:43:11 puesto 121 de un total de 142 valientes que hicieron frente al temporal.
Saludos a todos/as
Galgalugones
Tras la recogida de dorsales, cafés de rigor, charlas con los amigos y demás, se da el pistoletazo de salida con la suerte de haber amainado bastante la lluvia. Estaba perfecto para correr.
Dan la salida y cada uno a lo suyo, Michi buscando únicamente buenas sensaciones y disfrutar, en consonancia con los entrenamientos de las últimas semanas, que fueron bastante tranquilos. Valentín buscando correr por pulsaciones sin pensar y en tiempos y al ritmo que saliese, intentando, según el pulsómetro ir por debajo del umbral anaeróbico hasta el km 17 y a partir de ahí forzar un poco. Y Nacho ver únicamente en que estado se encontraba después del Maratón de Barcelona y como test previo a la media de Gijón dentro de dos semanas.
Puede decirse que todo salió mejor de lo esperado en los tres casos, ni los chaparrones ni el viento sobre todo los tres últimos km, que hicieron presencia, pudieron impedir el buen sabor de boca final de los galgas. Michi corrió muy suelto y recuperando buenas sensaciones después del mal día de la media de Siero, Valentín cumplió a la perfección los objetivos marcados y Nacho, no sólo comprobó que está totalmente recuperado de Barcelona sino que bajó su marca en la distancia en un minuto.
La organización perfecta como cada año. La pena que no acompañó el día.
Los tiempos y puestos finales fueron:
Michi 1:33:18, puesto 76
Valentín 1:42:04 puesto 115
Y Nacho 1:43:11 puesto 121 de un total de 142 valientes que hicieron frente al temporal.
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