Repitiendo participación respecto al año pasado y como única
representación del club, nuestro galga Nacho estuvo presente en la prueba.
Esta es su crónica:
"Tirada larga de lujo preparando el próximo maratón de
San Sebastián. Esta vez 28,5
kilómetros a recorrer entre Panes y Potes cruzando el
bonito Desfiladero de la
Hermida. Otra carrera de las que tiene algo especial.
El mister me dice que lo tengo que hacer como rodada larga y con calma, así que pactamos 5:30.
Madrugón y coche hasta Potes para coger el autobús que te baja a la salida. Unos 700 inscritos esperamos la salida sobre el puente de Panes, que como cada año vuelve a “temblar”. Disparo y al lío. Me cuesta contenerme al principio, pero voy a 5:25-5:30 que es el objetivo y no quiero pasar de ahí. Voy muy cómodo y a los pocos kilómetros se empieza a hacer un grupito muy animado, cada vez más numeroso, por las camisetas identifico a dos corredores del Trotapinares de Valladolid y me doy cuenta que uno de ellos es Alberto, que corrió junto a nosotros, en mayo, la media maratón de Gijón, ¡que coincidencias! Lógicamente fuimos comentando la “jugada” de aquel día, jejeje.
Los kilómetros pasan volando y a partir del 18-19, comenzando a salir del desfiladero, el grupo se rompe, el asfalto empieza a ponerse duro, gel “padentro” y tranquilidad. El GPS se me perdió durante un montón de kilómetros, por lo que hace mucho que no se el ritmo que llevo. Cuando recupero la señal marca una media de 5:33, así que hay que apretar un poquitín para llegar en 5:30. A partir del 24 se suaviza un poco el recorrido, aunque es un sube y baja (mucho más sube que baja) continuo hasta meta No paré de pasar corredores en los últimos kilómetros y llegué bastante entero a meta, aunque obviamente con las piernas un poco doloridas.
Lo pasé muy bien. Carrera muy recomendable y más si se está preparando un maratón de los muchos que se disputan en otoño."
El mister me dice que lo tengo que hacer como rodada larga y con calma, así que pactamos 5:30.
Madrugón y coche hasta Potes para coger el autobús que te baja a la salida. Unos 700 inscritos esperamos la salida sobre el puente de Panes, que como cada año vuelve a “temblar”. Disparo y al lío. Me cuesta contenerme al principio, pero voy a 5:25-5:30 que es el objetivo y no quiero pasar de ahí. Voy muy cómodo y a los pocos kilómetros se empieza a hacer un grupito muy animado, cada vez más numeroso, por las camisetas identifico a dos corredores del Trotapinares de Valladolid y me doy cuenta que uno de ellos es Alberto, que corrió junto a nosotros, en mayo, la media maratón de Gijón, ¡que coincidencias! Lógicamente fuimos comentando la “jugada” de aquel día, jejeje.
Los kilómetros pasan volando y a partir del 18-19, comenzando a salir del desfiladero, el grupo se rompe, el asfalto empieza a ponerse duro, gel “padentro” y tranquilidad. El GPS se me perdió durante un montón de kilómetros, por lo que hace mucho que no se el ritmo que llevo. Cuando recupero la señal marca una media de 5:33, así que hay que apretar un poquitín para llegar en 5:30. A partir del 24 se suaviza un poco el recorrido, aunque es un sube y baja (mucho más sube que baja) continuo hasta meta No paré de pasar corredores en los últimos kilómetros y llegué bastante entero a meta, aunque obviamente con las piernas un poco doloridas.
Lo pasé muy bien. Carrera muy recomendable y más si se está preparando un maratón de los muchos que se disputan en otoño."
Tiempo final de 2:36:22, puesto 512 de 647 atletas.
Un saludo a todos/as
Galgalugones
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